martes, 26 de noviembre de 2013

El perdón

Queridos hermanos

A mí me encanta escribir sobre el perdón.

Pilar Castaño Valencia
La periodista: —Para alguien de su trayectoria ¿qué se siente estar expuesta de esta manera?

Pilar Castaño Valencia: —Mucho dolor. No hay cariño, no hay respeto. Aquí la gente se agarra de cualquier cosa para satanizar, para crucificar. Acaban con todo el mundo, le caen al caído. Aquí no hay conmiseración ni caridad. Por eso cuando recibí la carta de Gabriela la perdoné sin dudarlo porque acepta su error, acepta que cometió una grave falta, pide perdón. Y a mí me criaron con el perdón en mi casa. Fue lo primero que me inculcó mi mamá: la humildad y el perdón, y eso es lo que hay en mi alma.

Parte del reportaje Pilar perdonó a la ilustradora aparecido el 13-11-24 en el periódico El Colombiano de mi ciudad y en otros de mi país.

La historia resumida (para los que no la sepan).

Pilar Castaño Valencia es una periodista que ha tocado varios tópicos de su profesión y ha escrito cuatro libros sobre modas y acababa de terminar el quinto. Sus conocimientos sobre modas son muy vastos y sus libros son esperado y sus libros muy cotizados en el mercado. Para el quinto libro necesitaba un ilustrador y su hijo, adolescente, le presentó a la novia de uno de sus amigos. La joven es estudiante que estudia diseño gráfico en Nueva York. Pilar la recomendó con la editorial por cuanto las muestras le fueron satisfactorias. El libro salió al mercado e inmediatamente resultaron dos ilustradoras norteamericanas demandando plagio. Los colombianos que no terminamos de recuperarnos de una sorpresa ya estamos acostumbrados a recibir la siguiente. La honorabilidad de Pilar Castaño Valencia puesta en la picota por un plagio de algunas (no todas) ilustraciones de su quinto libro. El mundo se le vino encima, sin conmiseración ni caridad como dice en su respuesta. La pérdida que le ocasiona ese plagio a la editorial suma  ciento sesenta millones de pesos (aproximadamente ochenta mil dólares). Hasta que por fin la ilustradora dio la cara y en su carta de perdón mostró la ingenuidad adolescente y pidió perdón. El nombre y la magnanimidad de Pilar quedaron en alto para oprobio de los que la satanizaron y la trataron de corrupta.

Pero nos falta un punto que he callado a propósito para cerrar el origen del perdón y la humildad de Pilar; para desarrollar ese punto repito las últimas frases de la respuesta de Pilar:

—Y a mí me criaron con el perdón en mi casa. Fue lo primero que me inculcó mi mamá: la humildad y el perdón, y eso es lo que hay en mi alma.

Gloria Valencia de Castaño
¿Pero, quién es la mamá de Pilar? Mis compatriotas pueden retirarse, porque colombiano mayor de veinticinco años que no sepa quién es Gloria Valenciade Castaño, nunca se ha sentado en frente de un televisor. Pueden clicar su nombre para que vean la semblanza que de ella hace Wikipedia. Esposa de un solo marido fue siempre una gran señora y trabajó en la televisión colombiana desde sus inicios en 1954 hasta mediados de la década del noventa. No necesitó las frivolidades de la farándula para ser por siempre la primera dama de la televisión colombiana. Su esposo, Álvaro Castaño Castillo, fue su director y su compañero de trabajo en varios de sus programas. Vivió en las pompas del mundo sin contaminarse de ellas. Desconozco la espiritualidad de doña Gloria, pero, como dice Jesús en el versículo 20 del capítulo 7 de San Mateo, «por sus frutos los conoceréis». El perdón y la humildad que nos muestra hoy Pilar, las virtudes en las que más insistió el Salvador en su paso por este mundo, son los frutos de doña Gloria.

Gabriel Escobar Gaviria

Noviembre de 2013.

viernes, 27 de septiembre de 2013

«Santo Padre yo ya no hago más abortos, estoy a favor de la vida»

Un médico se convierte y entrega al papa el material con el que practicaba abortos


La historia de conversión de Antonio Oriente, actual vicepresidente de la Asociación Italiana Ginecología y Obstetras Católicos (AIGOC) estremece a quien la conoce. Hace unos días, tuvo la oportunidad de saludar fugazmente al Papa Francisco, a quien entregó los instrumentos quirúrgicos que usó por años para practicar abortos. En declaraciones a ACI Prensa, el médico narró su historia.
(Aci/InfoCatólica) Durante varios años Oriente practicó abortos por dinero. Provenía de una familia pobre y para él, el éxito era «avanzar» en su carrera y ascender de clase social.
Su historia comenzó a cambiar tras su matrimonio con María Carmela, una pediatra que amaba los niños. Pasaron los años y no podían concebir un hijo, mientras Oriente seguía —como él dice— «matando a los hijos de los demás».
Cada día al regresar a casa, el médico encontraba a su esposa llorando. Una noche decidió quedarse hasta tarde en su consulta porque «estaba destruido, y no podía volver así a mi hogar».
Aquella madrugada, una pareja de esposos llamó a la puerta de su consulta pensando que ocurría un problema con el médico. La pareja escuchó su historia de dolor y lo invitaron a participar en un encuentro de oración para lograr algo de paz.
«Desde entonces —afirma Oriente—, comencé a conocer a un Dios distinto al que conocía, porque anteriormente el cristianismo me parecía una obligación y lo odiaba. Este Dios era misericordioso y me decía: 

»—Ábrete a mí, abandona todo tu sufrimiento».

Nunca más muerte hasta la muerte

«Un día sentado ante el crucifijo escribí una carta al Señor, lo que yo llamo un testamento espiritual: Nunca más muerte hasta la muerte. ¿Qué clase de hijo soy yo que asesino a los hijos de los demás? Abandono la cultura de la muerte y abrazo la vida».
Oriente y su esposa comenzaron a llevar una vida de católicos comprometidos y poco tiempo después, tras varios años de intentos frustrados, María Carmela quedó embarazada.
«Con este embarazo milagroso, el enfermo dejó de ser un trozo de carne para mí, se convirtió en un trozo de la carne del Cristo al que tenía el privilegio de tocar con mis manos, y desde ese día, dediqué totalmente mi vida a Cristo y a la lucha de la vida», agregó.

Su encuentro con el papa Francisco

El 20 de septiembre pasado Oriente pudo estar cerca del papa Francisco en la audiencia privada que el Papa concedió a los participantes de la Conferencia Internacional Mater Care que se celebró en Roma.
Oriente no formaba parte de la delegación de ginecólogos que saludaría al Santo Padre. Sin audiencia reservada ni pase alguno, Oriente decidió viajar a Roma para unirse al Mater Care.
Horas antes de tomar su vuelo pasó por su consulta y «como un robot», según explica, se dirigió a la silla de los pacientes para mirar en su base. Encontró ahí una estampa del año 1999 de la Virgen de Luján, la patrona de Argentina, país natal del papa Francisco.
En ese instante, Oriente comprendió que debía tomar la imagen consigo y volar con más decisión que nunca hasta Roma.
«Al llegar a la Sede de Pedro —cuenta—, me encontré con un obispo, le dije que recorrí 800 kilómetros hasta llegar hasta allí y que traía conmigo las herramientas del aborto para deponerlas ante el papa. La Virgen estuvo conmigo».
El médico atribuye la imagen de la Virgen de Luján a una paciente argentina que hace muchos años debió dejarla allí. La mujer pedía un aborto, pero él la disuadió y hoy día «es profundamente feliz junto a su hijo».

Santo Padre, yo ya no hago más abortos

En su encuentro fugaz con el Papa le dijo: 

—Santo Padre yo ya no hago más abortos, estoy a favor de la vida, quisiera una bendición para los médicos que quieren formar un equipo sanitario a favor de la vida.
El ginecólogo le entregó en ese instante una bolsa con el material quirúrgico, a lo que el Papa le respondió —según relata Oriente—: 

—Esta noche haré una oración. Esto lo tengo que llevar conmigo a mi habitación a Santa Marta». Luego le impuso sus manos y le dijo: «Usted está bendecido y luche por la vida.
Oriente explica que con este gesto, «los instrumentos de la muerte fueron abandonados a los pies del sucesor de Pedro en la Tierra, tal y como la muerte se pone a los pies de Jesús a favor de la vida.

Tomado de Infocatólica.

Me odian


Me odian los dos sacerdotes con los que he venido a Lourdes. Habían escogido un hotel a escasos cincuenta metros de la gruta para no tener que andar. 

Después de rezar por la mañana y celebrar la Misa en la capilla de San José, me he dicho: «Voy a conocer la Comunidad del Cenáculo» (Para quien no conozca la Comunidad del Cenáculo, se dedica a liberar a personas de sus adicciones, conozco a uno que pasó unos años allí y le dije que vendría y a ver si un chaval de mi parroquia se decide a venir). 

Pensaba venir solo pero dijeron: 

—Te acompañamos. 

Y nos pusimos a andar a las doce de la mañana, con un calor húmedo y pegajoso, todo el rato cuesta arriba desde las 12 hasta las 14 (ida y vuelta). Desde entonces me hablan poco y me miran mal. La verdad es que venían a descansar y nos hemos pasado el día andando. Es normal que me odien…, un poquito.

«El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día».


¿Por qué? ¿Qué podía hacer presagiar en ese momento ese odio hacia Jesús? Nada, todo lo había hecho bien. Sin embargo los planes de Dios se cumplen. Y también pasa eso en nuestra vida. Tal vez busquemos a Cristo para descansar, y sin duda lo haremos. Pero cuanto se pone en camino en nuestra vida y decimos que queremos acompañarle, no nos extrañe que nos encontremos con la cruz. Nos encontraremos con el peso del calor, de las cuestas arriba, de la incomprensión de los buenos y de los malos, muchas veces con el desprecio. Y entonces hay que recordar ¿A quién seguimos? ¿Nuestros intereses, nuestra comodidad, incluso a nuestra felicidad? No, seguimos al Mesías, al Hijo de Dios vivo. Y ninguna dificultad podrá apartarnos del amor de Cristo. Entonces el camino es gozoso, aunque doloroso muchas veces. La meta es clara y el paso se vuelve firme y del dolor nace la alegría.


«Haced lo que él os diga».


Siguiendo las palabras de María no tendremos miedo de seguir a Cristo con radicalidad evangélica, y esas raíces tienen forma de cruz.

Tomado de Oración y liturgia. Archidiósecis de Madrid Comentarios a las lecturas,

miércoles, 21 de agosto de 2013

El sacerdote de los hambrientos

Daniel Saldarriaga lidera el Banco de Alimentos, proyecto que llegó a 100.000 toneladas entregadas.


Tomado de El Tiempo 13-08-18



No sabe lo que es sentir hambre, pero se la calma a 120.000 bogotanos al día.
Debido a sus 1,89 metros de estatura, parece más un basquetbolista retirado que un sacerdote bonachón que lidera el Banco de Alimentos, programa social de la Arquidiócesis de Bogotá que esta semana llegó a las 100.000 toneladas entregadas en 12 años. (Vea imágenes del trabajo diario del padre Saldarriaga en el Banco de Alimentos).
«Nos dedicamos a salvar alimentos ya maduros que quedan en los almacenes de cadena, excedentes de cosecha y otras donaciones en especie. Aquí nada se pierde», dice el padre Daniel Saldarriaga Molina, de 49 años y nacido en Medellín un sábado santo.
Saldarriaga le atribuye a la voluntad divina que el entonces cardenal Pedro Rubiano le haya encomendado la misión de organizar un banco de alimentos similar a los que a finales de la década del noventa arrancaban en la capital antioqueña y en Cali. (Vea la infografía: La obra del sacerdote en cifras)
«Yo era el sacerdote de la iglesia de Tibabuyes, en Suba, y no tenía experiencia en esa labor», afirma Saldarriaga, un secerdote que no ha tenido problema en quitarse la sotana y ponerse el overol a la hora de ir por una donación. Así lo hizo, por ejemplo, en la Navidad del año 2001, cuando apenas comenzaban.
Se fue en el viejo Dodge 48 de su parroquia a recoger unos pasabocas de la empresa Colombina. «Cuando me vieron llegar en semejante cacharro me sabotearon. Me dijeron que para llevar la carga se necesitaban mínimo cinco furgones», cuenta el padre. Los bodegueros le explicaron que si no se llevaba la mercancía tendrían que destruirla en el relleno Doña Juana. El sacerdote les preguntó qué era más fácil: ¿botar tanta comida o ayudarle a transportarla. Ese mismo día, tres pisos de su iglesia sirvieron para guardar los confites que fueron repartidos en menos de tres días. En otra ocasión, se obsesionó con una bodega en Paloquemao, sede actual del banco, que le había pertenecido a una fábrica de papas fritas, pero que para los miembros de la junta directiva, encabezada por Arturo Calle, Ramiro Escobar, Francisco Guaquetá y Julia Ulloa, era imposible de comprar, pues valía 1.880 millones de pesos.
En plena reunión para tratar el tema, en el Metropolitan Club, Saldarriaga aseguró que la plata ya la tenían. Todos quedaron fríos. «Arturo Calle preguntó que si teníamos todo eso y yo le dije que sí, que estaba en los bolsillos de él y de los demás miembros. Me aplaudieron y pudimos comprarla», dice.
Otra anécdota campeona que dibuja su espíritu de comerciante tiene que ver con la manera como logró que el último Chevrolet Spring que se ensambló en Colombia, en el 2006, se lo regalaran al banco y no a otra organización. «Le dije a la gente de Colmotores que yo convencería al cardenal Rubiano de subirse al carro y promocionarlo».
Y así fue. La eminencia salió en los medios manejando la nave, pudo ser rifada y dejó una ganancia de 157 millones de pesos. ¿Y algún caso lo ha marcado? «Una mujer de Patio Bonito que pese a su pobreza les da de comer a ochenta niños y a cuarenta viejos», remata.
FABIÁN FORERO BARÓN
Redactor de EL TIEMPO

domingo, 11 de agosto de 2013

Una oración en cada dedo


Esto lo enseñó el papa Francisco y soy uno más que lo divulga:

1.El pulgar es el más cercano a ti. Así que empieza orando por quienes están más cerca de ti. Son las personas más fáciles de recordar. Orar por nuestros seres queridos es una dulce obligación.

2.El siguiente dedo es el indice. Ora por quienes enseñan, instruyen y sanan. Esto incluye a los maestros, profesores, médicos y sacerdotes. Ellos necesitan apoyo y sabiduría para indicar la dirección correcta a los demás. Tenlos siempre presentes en tus oraciones.

3. El siguiente dedo es el más alto. Nos recuerda a nuestros líderes. Ora por el presidente, por los congresistas, por los empresarios, y por los gerentes. Estas personas dirigen los destinos de nuestra patria y guían a la opinión pública.. Necesitan la guía de Dios.

4.El cuarto dedo es nuestro dedo anular. Aunque a muchos les sorprenda, es nuestro dedo más débil, como te lo puede decir cualquier profesor de piano. Debe recordarnos orar por los más debiles, con muchos problemas o postrados por las enfermedades. Necesitan tus oraciones de día y de noche. Nunca será demasiado lo que ores por ellos. También debe invitarnos a orar por los matrimonios.

5.Y por último está nuestro dedo meñique, el más pequeño de todos los dedos, que es como debemos vernos ante Dios y los demás. Como dice la Biblia "los últimos serán los primeros". Tu meñique debe recordarte orar por ti. Cuando ya hayas orado por los otros cuatro grupos verás tus propias necesidades en la perspectiva correcta, y podrás orar mejor por las tuyas

viernes, 2 de agosto de 2013

Bergoglio, la Mano de Dios

Autor: Rubén Darío Barrientos
1. de agosto de 2013
Tomado de El mundo, Medellín (13-08-01).
Descripción: http://www.elmundo.com/images/fotosinternas/110311080330RUBEN%20DARIO%20BARRIENTOS.jpg
En Argentina dicen que los ídolos de leyenda, son Gardel, Maradona y Evita Perón. Pero el papa Bergoglio, ya ha irrumpido triunfante en esa lista exclusiva e infinita de la grandiosidad. Y si a Maradona lo conocen en el mundo como la Mano de Dios (Partido Argentina-Inglaterra, cuartos de final, Copa Mundial de Fútbol 1986, estadio Azteca de México, 22 de junio, gol empujado con la mano izquierda por Diego Armando, minuto 6.° del segundo tiempo) ese apelativo se lo va a pulverizar rapidito el papa Jorge Bergoglio al inmortal futbolista argentino, recién operado de una insuficiencia visual por presbicia.

Con un estilo fiel al Evangelio, que les da protagonismo a los más necesitados, sus palabras son sencillas, directas, afables y cargadas de un aluvión de fe. Ya lo dijo: «Quiero una iglesia pobre y para los pobres». No podemos perder de vista que Bergoglio proviene de la Compañía de Jesús, estudiosa de las raíces teológicas. El papa abre los brazos, como significando inclusión, despunta frases cortas y convence. Fue portada en Time y los libros que recogen su biografía se han agotado en muchísimos países. El 23 de junio, hablaron en España del «efecto Bergoglio» de sus primeros cien días de pontificado.

Su cuenta Twitter rebasó los siete millones de seguidores, confirmando que es un fenómeno de comunicación de todos los tiempos. El Papa se agiganta en América Latina por su humildad. No en vano renunció a vivir en el suntuoso apartamento pontificio. Así mismo, ha preferido el blanco de la sotana. Su anillo del pescador es de plata y no de oro como vitaliciamente pareciera ser; porta un crucifijo de hierro (el mismo que trae desde su arzobispado en Argentina); sus zapatos negros reemplazaron los mocasines rojos de marca y sus medias son negras y no blancas.

Cabeza visible de 1.200 millones de católicos en el mundo, acaba de concluir con un sonoro éxito las jornadas mundiales de la juventud en Brasil. Desprendido de la vida, prefirió el riesgo del contacto con la gente, sacrificando seguridad y blindaje, rodeado de millones de personas y ensordecido con los vítores lanzados. Quiere andar por las calles de Roma para «no estar enjaulado», según lo ha predicado, urge hacer una profunda teología de la mujer, no ceja en su empeño por buscar que los jóvenes se acerquen a Dios y ha enfrentado los escándalos vaticanos con vehemencia.

Ha disparado la religiosidad en muchos países y en Argentina, por ejemplo, los indicadores pasaron del 72 % al 84 %. A sus 76 años, parece un pipiolo que quiere ser y parecer, amén de romper protocolos y evangelizar con fervor y entusiasmo. Ya ha salido sin estola al balcón pontificio y su ola de ilusión despierta furor porque sus frases se deslizan con limpieza y quieren cambiar al mundo. Es caudillo, aún sin publicar documentos relevantes: meramente lo es, con sus palabras como salidas de la Mano de Dios.

Su nombre Francisco es un homenaje a quien exhorta con el ejemplo. Utiliza un sillón de madera tapizada (no un mueble de oro) y ora muchas veces tendido en el suelo. El jesuita pamplonés José Enrique Ruiz dijo algo preocupante: «Si el Papa sigue cambiando tantas cosas, lo pueden matar». Yo no había pensado en eso, pero hay mafias de la corrupción y del abuso de poder que podrían conspirar. Dios guarde a Bergoglio.

jueves, 6 de junio de 2013

Testimonio de conversión

La bruja

Gabriel Escobar Gaviria

Tal vez algunos hayan leído el libro La bruja del escritor colombiano Germán Castro Caycedo. Yo lo leí.

Género; Crónica. El escritor, como uno de los mejores periodistas de mi país que es, describe unos hechos sin parcializarse en ellos ni a favor ni en contra, y sin necesidad de asegurar durante el escrito que lo hechos los tiene por ciertos por cuanto él siempre hace investigaciones sobre los temas que va a tratar.

Los hechos narrados ocurrieron durante las décadas del 70 y del 80 del siglo pasado.

Tal vez alguno haya visto el seriado La bruja basado en el mismo libro. Yo no lo vi ni lo veré, razón por la cual no puedo comprobar la fidelidad del seriado respecto de la crónica.

En renglón y medio, el argumento de la crónica: la protagonista, cuyo nombre fue cambiado en el libro por preservar su identidad, es una mujer joven, maestra de profesión en uno de los pueblos de Antioquia de nombre Fredonia, conoció a  alguien que les adivinó la suerte a ella y a algunos amigos, y ella pidió que le enseñara. Aprendió y empezó como un juego con los compañeros de profesión. Como las predicciones le salían acertadas, su fama se regó por la región y alcanzó altos niveles en Gobierno y en los capos del narcotráfico de la época. Jefes de Estado que no tomaban decisiones de Gobierno sin consultar con ella y capos que hacían los envíos bajo su visto bueno. Ésa es la obra completa: un Estado manejado por la brujería y por el narcotráfico.

Ella empezó a darse cuenta de que tanto poder no era gratis y de que el espíritu del mal se había apoderado de su alma y buscó ayuda. La encontró en tres personas: la monja Alicia Echeverri Calle, monseñor Alfonso Uribe Jaramillo, obispo de la diócesis de Sonsón-Rionegro (es una diócesis con dos sedes) y del padre Guillermo Gil, sacerdote de la diócesis de Sonsón-Rionegro, exorcista autorizado por el Obispo Alfonso.

Hay tres o más exorcismos hasta que la monja Echeverri logra hacer salir del cuerpo de la bruja el demonio que sale por la boca de la mujer en forma de un animal parecido a un armadillo, y como el hecho ocurriera en la iglesia de San José del centro de Meddellín, el animal logró la calle y atravesó la avenida Oriental, muy concurrida, y se confundió con los peatones de la calle ayacucho donde ya no hubo testigos que aseguraran haberlo visto. No alargo más el cuento porque no es necesario. Y el final de mi historia avendrá después de que les cuente lo que pasó el lunes pasado.

Como era un lunes festivo, había tratado de enderezar mis ocupaciones para que me quede tiempo de seguir con mis campañas en mis blogs. Como a las 6:00 p. m. me dijo Juan Gonzalo, mi hijo, que una amiga suya lo había invitado a una conferencia que daría la bruja de Germán Castro Caycedo en una iglesia de El Poblado, a las 8:00 p. m.

En principio sentí pereza que le manifesté a mi hijo diciéndole que quién sabe qué iglesia rara había cogido a esa señora y la tenía enseñando por fuera de nuestra Iglesia; pero inmediatamente recapacité y pensé que si ella había buscado a Dios en nuestra Iglesia y ante tan dignos personajes, aún después de 20 años sería difícil que hubiese traicionado a quien la salvo.

En realidad, nunca supe más de la bruja que lo que me dijo el libro. El libro pone a terminar la vida profesional de la bruja en el Liceo La Paz de Envigado. Varias veces le he preguntado a mi esposa por ella, puesto que mi esposa lleva 34 años en el magisterio de Envigado, algunos de ellos en La Paz, y nunca he tenido respuesta.

Pregunté a mi hijo cuál sería la iglesia y me dijo que la Nuestra Señora de los Dolores.



Decidí acompañarlo.

Quedé impresionado por varias cosas:

Encontré a una mujer de fe, que sabe quién la salvo, que sabe quién le perdonó sus pecados y que está metida en una campaña que trata de apartar a la juventud de horóscopos, de tarotes, de amuletos, de nueva era y de todas las trampas del maligno para recaudar incautos. Encontré a una mujer que ya no tiene temor de que su nombre se conozca: Lucrecia Gaviria.

La iglesia, que no es pequeña estaba con todas las bancas ocupadas aunque no se colmó de gente de pie, el ocupado de las bancas, insisto, fue completo.

Las únicas dos personas que sobrepasaban los 40 años éramos Lucrecia y yo. Era un movimiento juvenil lo que allí se estaba dando.

Su relato tuvo apenas algunas diferencias con el libro. Al parecer no es maestra pues no mencionó nada parecido a magisterio. No mencionó el armadillo.

Pidió el rezo del Santo Rosario y la bendición de los alimentos.

Oremos por ella para que su perseverancia dure para siempre

Y antes de sentarme a escribir esto, me comentó mi hijo, que la joven que lo invitó tiene problemas con su esposo de quien está separada.

Pongamos esa pareja también en oración.



lunes, 8 de abril de 2013

Día del niño por nacer



Saludito dominical 183


Ernesto Blandón ReyDocente del Colegio de la Universidad Pontificia Bolivariana
—La paz, con vosotros —escucharon los discípulos de Jesús aquella tarde. 
La noticia de su resurrección los tenía muy inquietos, pero el saludo los conmovió, era la forma de llagar cuando se movía entre ellos. Les había dado lo que tanto buscaban, la experiencia de una novedad extraña pero radicalmente necesaria, el encuentro con él los había convocado y unido, era el milagro. La paz era la respuesta a la pesadumbre de la vida y el desespero para enfrentarla, su presencia generaba una actitud diferente; de solitarios, al encuentro con los otros les había dado a comprender el mandamiento que tanto repetía: «amaos como yo os he amado». Su trágica partida, ante el anuncio de la resurrección, garantía de su presencia, les devolvía la esperanza. La paz fue el precio de su entrega por eso podían comunicarse, el fruto el encuentro con los otros
—Como mi Padre me envió, también yo os envío a vosotros. 
Obviamente que tales palabras los ha sorprendido. Primero el saludo, luego el envío a hacer lo mismo que él; el perdón que se había dado en la acogida que Jesús le había hecho, sellada por el Espíritu Santo les inquietaba y animaba a salir acompañándolo en su misión salvífica. Verlo resucitado era la garantía de la misión que les encomendaba: 
—A quienes perdonéis los pecados les quedan perdonados; a quienes se los retengáis le quedan retenidos.
Ver a Jesús resucitado era la confirmación de la victoria sobre la muerte, de la que les hacía partícipe en el abrazo de la paz; era lo que iban a llevar, no al estilo del mundo, sino en la entrega que había hecho y de la que les hacía partícipes. En la cruz habían contemplado sus llagas y en ellas quedaron los dolores de cada uno sepultados, así era Jesús; amaba hasta el extremo sin dejar nada para sí.
Vivamos estos días viviendo del amor que se nos entrega en la muerte y resurrección de Cristo, En él somos nos movemos y existimos; por él nuestras vidas se pueden ofrecer en la generosidad que lo ha hecho con nosotros y la paz que nos da es inagotable pues su amor es eterno
Hagamos de este «Saludito» una cadena de oración por quienes padecen un sufrimiento. Algunos destinatarios, han dado a conocer necesidades apremiantes que ponemos en las manos de Dios para que los llene de fortaleza, anime y si es su voluntad sean curados de sus enfermedades.
El rezo de mil Padrenuestros por la salud de los que padecen cáncer, tú rezas sólo uno y pasas el mensaje a otros para que sigamos rezando. Pásalo, por favor. —Petición de nuestro amigo Ángel Santacoloma Luis Alfonso
Un abrazo
PAZ y BIEN en el Señor Jesús.
Ernesto B. / Docente del Colegio de la UPB
Comparto con ustedes mi poemario TE VI PASAR que se encuentra en las librerías de los Paulinos 

viernes, 5 de abril de 2013

Saludito dominical 182


31 de marzo 31 de 2013

Ernesto Blandón Rey
Docente del Colegio de la Universidad Pontificia Bolivariana

La noche va pasando, esa trágica noche en que todo es confuso, sobre todo la concordia entre los hombres ante el acoso de conflictos que se mueven de un lado para otro, pues el perdón y la reconciliación esquivos sumen en la derrota a la humanidad. De la muerte resurge la vida, pues Jesucristo muerto por nuestros pecados descendió al infierno humano, lugar del odio, y de la injusticia, para rescatar a quienes encadenados por tan dura realidad se sumergen en el infortunio de la vida, tan ´profundamente, que la viven como muerte. Jesucristo ha ido allí, a esa región subterránea del hombre, de cada uno de nosotros para llenarnos de su vida en ese amor de total entrega que lo llevó a la cruz. Su perdón nos ha arropado, su cuerpo y sangre entregados por cada hombre son el sacramento de nuestra salvación permitiéndonos de esta manera un encuentro diferente con nosotros y los otros, esperanzador.
La noche va pasando, llega la aurora que no conoce el ocaso, pues la Resurrección del Señor, es la confirmación de que vencida la muerte, el día, la claridad de la vida se nos abre sin miedo alguno, sin ninguna sospecha de que su amor lo es todo ¡Cristo Nuestra pascua ha resucitado! Jubilo externo de un eco interno, manifestación de un encuentro vital, actitud que se expresa en un nuevo estilo de vida, que tiene como base la vida que se ha entregado por nosotros, para que animados por él, hagamos lo mismo con la nuestra. Resucitó por y con nosotros, es la buena noticia de éste tiempo, hoy más que nunca cuando los humanos necesitamos encontrarnos con el amor para saber qué es y a qué nos lleva.
Estos días son de alegría, justicia y paz en Nuestro Señor Jesucristo, vivámoslos con la mirada puesta en Él, para que en nuestras acciones confirmemos que realmente está resucitado.
Hagamos de este “Saludito” una cadena de oración por quienes padecen un sufrimiento. Algunos destinatarios, han dado a conocer necesidades apremiantes que ponemos en las manos de Dios para que los llene de fortaleza, anime y si es su voluntad sean curados de sus enfermedades.
El rezo de mil Padrenuestros por la salud de los que padecen cáncer, tú rezas sólo uno y pasas el mensaje a otros para que sigamos rezando. Pásalo, por favor. – Petición de nuestro amigo Ángel Santacoloma Luis Alfonso
Un abrazo
PAZ y BIEN en el Señor Jesús.
Ernesto B. / Docente del Colegio de la UPB
Comparto con ustedes mi poemario TE VI PASAR que se encuentra en las librerías de los Paulinos 

lunes, 1 de abril de 2013

El humo que nos quieren vender del papa


Y que no estamos para comprarlo

Se nos está vendiendo humo con respecto al nuevo papa, humo que parecen comprar encantados desde católicos necios a ateos no se sabe si convertidos por milagro en vida del papa Francisco o felices por ver a la Iglesia en peligro.

Que teólogos contestatarios como Küng y Boff, rabinos, grandes maestres de la Masonería, el P. Nicolás y demás ejusdem furfuris estén celebrando la llegada del cardenal Bergoglio convertido en papa Francisco podría ser preocupante. Esperemos que todo sean vanos sueños originados por un papa sencillo y poco protocolario. Lo que no quiere decir, en principio, más que eso. Que es sencillo y poco protocolario.

Hay que ver el entusiasmo que ha producido el que quiera usar zapatos negros en vez de los rojos de Benedicto XVI. El color de los zapatos no da ni quita santidad. A mí me trae sin cuidado que los use negros o rojos. Sólo me fastidia algo el ataque gratuito a Benedicto XVI a quien se quiere presentar como el papa ostentoso y derrochador frente a quien llega con la sencillez evangélica y la pobreza del santo de Asís. Como si los zapatos rojos costaran más que los negros. Y teniendo en cuenta, además, que no costaban ni un euro porque se los regalaban al papa.

Y lo mismo cabe decir del anillo y del pectoral. Que ya no van a ser de oro, sino de plata. ¿Habrá necio que piense que estamos hablando de una fortuna? ¿Que miles de pobres podrían salir de su pobreza por un anillo o un pectoral? Eso sí que es el cacao del loro. Pectorales habrá muchos en el Vaticano con lo que el que se pusiera el papa no costaría ni un euro. Y el anillo, que tiene que ser nuevo, posiblemente sería obsequio de alguna joyería romana que se cobraría con la propaganda de ser proveedora de la Casa Pontificia. ¿Y cuál puede ser el coste del anillo papal? ¿Diez mil euros? ¿Qué se resuelve con eso?

Las casullas de la misa de inicio del pontificado el papa dicen que las quiso más sencillas. Pues eso sí que tuvo un coste. Porque las más lujosas estaban ya en las cajonerías vaticanas y las nuevas hubo que fabricarlas. Aproximadamente unas trescientas.

Prefiere ir en coches menos lujosos, pues muy bien. Tampoco eso añade ni quita nada. Lo del papamóvil es ya de aurora boreal. Sus antecesores amaban ese boato y él va a cuerpo descubierto. Pues sus antecesores iban también así hasta que un terrorista casi mata a Juan Pablo II. Me temo que Francisco, si no cambia, va a causar más de un problema a los encargados de la seguridad.

¿Trata más llanamente a los cardenales y a otras personas? Tampoco eso lo define como mejor o peor que los que le precedieron. y si bajas el listón puede venir el abuso. Como que Cristina Fernández se dirija a ti como Jorge. Lo de besar a señoras de alta representación no era hasta ahora costumbre pontificia pero como se generalice dejará de ser novedad. El problema se lo busca el papa que no puede estar besando a mil señoras y será criticado por las no osculadas que se sentirán con el mismo derecho que quienes lo recibieron. En las audiencias generales dar la mano es lo más cómodo, rápido y menos comprometido, si a una persona se la da la mano, a otra un beso, un abrazo a la tercera, eso se convierte en un follón monumental.

Todos los papas han besado niños, pobres, enfermos... ¿Que Francisco lo va a hacer más? Pues tampoco estaremos ante ninguna gran novedad. Y todos los papas han ido a cárceles, asilos, hospitales... ¿A ver si quienes no saben nada se creen que Francisco ha descubierto el Meditarráneo?

Al P. General de los jesuitas le ha abrazado y le ha pedido que le trate de tú. ¿Va a hacerlo con los de todas las órdenes y congregaciones religiosas? ¿Masculinas y femeninas? ¿Por qué con unas sí y otras no? ¿Y con muchos de los que reciba? Se dice que en todo esto hay mucho de carácter argentino y de populismo peronista. Puede que sí. Pero ya no está en Argentina ni el peronismo merece una extensión universal.

Se va a alojar en Santa Marta y no en los palacios apostólicos. Pues como si le adecúan la antigua estación de ferrocarril, hoy convertida en tienda vaticana. Tiene todo el derecho a vivir donde considere oportuno. Y si con ello se crean problemas ya los resolverán o cambiará de alojamiento.

Estamos en los primerísimos días de su pontificado. Días de aprendizaje. Esperemos pues a ver en que deriva todo esto.


Como por otra parte es normal
Esto nos dice el Servicio de Información Vaticano:
Después de la catequesis y de los resúmenes en las diversas lenguas a cargo de los lectores, el papa saludó a todos y, hablando en italiano se dirigió, entre otros, a los universitarios que participan en el encuentro internacional promovido por la Prelatura del Opus Dei, dándoles las gracias por sus oraciones y afecto al papa. «Con vuestra presencia en el mundo universitario —dijo— cada uno de vosotros realice lo que deseaba San Josemaría Escrivá: “Es, en medio de las cosas más materiales de la tierra, donde debemos santificarnos, sirviendo a Dios y a todos los hombres”».

De seguir el papa en la línea que está manteniendo pienso que muchos de los que hoy dicen estar encantados con él se van a desilusionar pronto. Porque lo que quieren es un papa que marche con ellos en la labor de destruir la Iglesia. Y cuando comprueben que no podrán contar con él para eso le llegarán los ataques.

lunes, 25 de marzo de 2013

Saludito dominical 181


Ernesto Blandón Rey
Docente del Colegio de la Universidad Pontificia Bolivariana
Nos preparamos para algo, por eso hacemos lo que hacemos, pero el sello del tiempo dice que todo camina hacia un acabamiento, es la tragedia de la cual se quiere escapar con unturas de diverso tipo, sin embargo,  el acoso de lo evidente es imparable, la muerte está ahí, como impotencia de ser, en ese acoso por vivir atrapando y consumiendo posibilidades, a costo de serios desafueros e injusticias, como forma de dominar la muerte y disuadir el sufrimiento. En este marco humano se entra en los preparativos que San Lucas hace referencia: «id y preparadnos la Pascua para que la comamos» Es algo diferente, un momento de la histori de la humanidad y de cada hombre de especial significado, Jesús a lo largo de su vida se ha preparado para entregar su vida, por eso dice: «Con ansia he deseado comer esta Pascua con vosotros» como un acontecimiento  en la vida de los hombres, tiene poder transformador, genera un cambio de dirección, al sentarse en la mesa y decir mostrando el pan «Este es mi cuerpo que se entrega por vosotros» En el marco de la debilidad humana se hace débil por nosotros para hacernos fuertes en su entrega, la cruz fue testigo de amor tan grande, sin límite, reconciliando al hombre con Dios; aniquilando en su muerte el miedo a causa del pecado. Jesús lee el corazón de los hombres, no juzga a nadie, tampoco lo excluye «a toda la Tierra llega su voz hasta los límites del orbe su lenguaje” Prepararnos para la entrega de Jesús es una condición para acogerlo «¿qué debemos hacer?» Su presencia la evidencia, nuestro cansancio lo confirma, la arrogancia y las injusticias cometidas son el sello de que algo anda mal; tomar conciencia de la propia realidad, de lo que somos e identifica nos hacen necesitados del amor que Jesús nos ofrece, el que nos entrega en su cuerpo. En su ser tiene el sello del amor de Dios Padre.
Jesús nos invita a estar con él, en el salón dispuesto para la fiesta del amor, celebremos con él, la victoria sobre nuestros egoísmos, al despertar en nosotros el deseo de hacer lo mismo, encontrando así nuestra verdadera condición de humanidad
Hagamos de este Saludito una cadena de oración por quienes padecen un sufrimiento. Algunos destinatarios, han dado a conocer necesidades apremiantes que ponemos en las manos de Dios para que los llene de fortaleza, anime y si es su voluntad sean curados de sus enfermedades.
El rezo de mil Padresnuestros por la salud de los que padecen cáncer, tú rezas sólo uno y pasas el mensaje a otros para que sigamos rezando. Pásalo, por favor. – Petición de nuestro amigo Ángel Santacoloma Luis Alfonso
Un abrazo
PAZ y BIEN en el Señor Jesús.
Ernesto Blandón Rey / Docente del Colegio de la UPB
Comparto con ustedes mi poemario TE VI PASAR que se encuentra en las librerías de los Paulinos.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Saludito dominical 180


Ernesto Blandón Rey
Docente del Colegio de la Universidad Pontificia Bolivariana

Poco a poco Nuestro Señor Jesús nos lleva a la Pascua. Se había retirado a orar, acudía constantemente a ello, sobre todo porque veía que una realidad supremamente difícil lo esperaba. Aquella mujer que le llevan para apedrearla, lo dice todo. A la pregunta acusativa de los escribas y fariseos, su silencio es lo que se escucha, no hay respuesta alguna; lo observan detenidamente esperando alguna palabra para irse en su contra. Escribe con su dedo en la arena, en una comunicación inesperada pero llena de significado, viniendo a la memoria «el favor de Dios» que en su persona se hace presente. Ante la insistencia de una respuesta y la incomprensión del gesto realizado, escucharon de sus labios: «El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra». La escena tuvo un giro que hizo que de acusadores pasaran a ser seres en retirada, a la espera de otra oportunidad, cambio interesante, antropológico si se quiere, en cuanto pone sobre el tapete una actitud muy humana, no son los acusadores los más limpios de corazón. Así lo vivieron quienes allí estaban, sobre todo los más ancianos.
Había que recordar las Escrituras por eso volvió a lo de antes, la arena era un instrumento para hacer memoria «pondré mi ley en sus corazones y haré que caminéis según mis preceptos» Nuestro Señor de repente se ve solo ante el dolor de quien temía por su vida, no venía a quitarla sino a darla y en abundancia, por eso la acogía y le dio lo que la animaría: el perdón «Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más».
Jesús ora, dialoga constantemente con su Padre, sabe que no es aceptado por muchos y que por lo que dice y hace , lo buscan para matarlo. La cruz lo espera, no solo eso, la corona de espinas, la flagelación, pero es allí donde confiesa el amor por la humanidad «Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen» ha dicho en un grito suplicante
El Señor Jesús nos espera con los brazos abiertos, durante estos días; vivamos de su amor, su perdón anima nuestro ser a la vida. Es el amor que esperamos y que tanto buscamos.
Hagamos de este Saludito una cadena de oración por quienes padecen un sufrimiento. Algunos destinatarios, han dado a conocer necesidades apremiantes que ponemos en las manos de Dios para que los llene de fortaleza, anime y si es su voluntad sean curados de sus enfermedades.
El rezo de mil Padresnuestros por la salud de los que padecen cáncer, tú rezas sólo uno y pasas el mensaje a otros para que sigamos rezando. Pásalo, por favor. Petición de nuestro amigo Ángel Santacoloma Luis Alfonso
Un abrazo
PAZ y BIEN en el Señor Jesús.
Ernesto Blandón Rey. Docente del Colegio de la UPB

Comparto con ustedes mi poemario TE VI PASAR que se encuentra en las librerías de los Paulinos